martes, 22 de abril de 2008

México perdió la guerra.

La estrategia para el combate al narcotráfico no podía estar más equivocada. Demagogia e ineptitud pura y dura de Felipe Calderón y su gobierno.

Si bien en primera instancia se justifica la presencia del ejercito para retomar el control en regiones completas del país, donde mandaban e imponían su voluntad de manera absoluta los carteles; y donde inclusive tenían comprados, amenazados y/o controlados a todos los niveles de gobierno -federal, estatal y municipal-, no se ha mostrado inteligencia, ni capacidad para una lucha de más largo aliento y de manera integral, atendiendo a las causas y a las debilidades estructurales.

El nivel de desempleo, sub-empleo, paupérrimos sueldos, exceso de regulación, burocracia y corrupción gubernamental, es tal, que incentiva a que la mitad de la economía esté en la informalidad. Y una buena cantidad de millones han preferido emigrar en años recientes, a pesar de poner en riesgo su vida y la de su familia, con la esperanza de un mejor futuro, mismo que les fue negado en su propio país.

A pesar de la ya de por si catastrófica situación nacional, expertos calculan que una quinta parte de la población del país depende de la derrama económica que produce la prospera industria de las drogas.

¿A quién quieren engañar con operativos militares?

Si la gente no va a dejar esa actividad porque simplemente no tiene otra opción para poder subsistir. Ni el país puede darse el lujo de prescindir de millardos de dólares por las exportaciones de drogas. Ese simple hecho ocasionaría un problema grave en la balanza comercial. Eso es algo que deberían saber los gobiernos de EUA y México. No hay forma de resolver el problema de raíz sin inversiones que incentiven la actividad económica.

Ningún combate serio al narcotráfico puede darse sin primero mejorar el nivel de vida de la gente y crear oportunidades para todos esos millones de desocupados y excluidos del progreso. Sin eso ninguna estrategia militar tendrá éxito. Y cuantas veces se intente combatir al narcotráfico por la vía armada, cuantas veces que serán corrompidos por el descomunal poder económico.




La única evidencia que puede indicarnos que el combate al narcotráfico es exitoso, es que el abasto se reduzca drásticamente y por ende los precios de las drogas se disparen. Y nada de eso se ha reportado en ninguna parte del mundo. Así que no le han dado un golpe significativo al crimen organizado en ya más de un año de la fallida estrategia militar.

¿Hasta cuándo van a entender el problema y actuar de manera congruente e integral?

Cada día que pasa hay más drogadicción, más consumo de drogas, más ejecuciones y más violencia.

¡México ya perdió la guerra y su gobierno ni siquiera se ha enterado!

¡Alguien avisele!




 

69 comentarios:

Anónimo dijo...

te agrego al blogroll n3f1s =p

Y sí, la lucha contra el narcotráfico es pura mamada y pantalla. Eso ni quién lo dude. Bueno, sólo los pendejos se lo creen...

Ontobelli کτγℓع dijo...

"La Anécdota

Me refiero de nuevo, porque explica y define el contenido de esta columna, a un importantísimo dato publicado en “El Negocio” –Grijalbo, 2001-, cuyo autor es Carlos Loret de Mola, quien a su vez logró que le fuera filtrada esta información desde el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN):

–“Si se terminara con el narcotráfico, la economía de Estados Unidos caería entre diecinueve y veintidós por ciento, en tanto que la mexicana se desplomaría hasta sesenta y tres por ciento”.

De considerarse que, en la peor crisis de los últimos años, la de 1995, se afectó sólo al cinco por ciento de la economía nacional, imagínense los efectos devastadores de una sacudida que multiplicase aquello por más de doce veces.

Con ello puede precisarse y responderse la consabida pregunta acerca de quién va ganando la guerra entre los narcos y las corporaciones militares y policíacas hondamente infiltradas. "

WEB: www.rafaelloretdemola.com

Ontobelli کτγℓع dijo...

"El hoy célebre prófugo Joaquín El Chapo Guzmán, fue capturado en Guatemala en el mes de junio del año de 1993 y traído a la Ciudad de México en un avión de paracaidistas del Ejército mexicano, bajo la custodia del entonces jefe de la lucha contra el narcotráfico de la Procuraduría General de la República, el también militar Jorge Carrillo Olea.

Durante los interrogatorios que se le hicieron en el avión, El Chapo Guzmán reveló los nombres de los funcionarios y autoridades que tenía en su nómina, entre ellos algunos comandantes, un ex procurador, un ex subprocurador.

Las declaraciones de El Chapo fueron levantadas por sus custodios militares ante suficientes testigos, entre ellos el propio Carrillo Olea y el entonces director de la policía judicial militar, el general Álvarez Nahra.

Pero nadie tomó la precaución de subir al transporte militar a un agente del Ministerio Público, por lo que esas declaraciones no tuvieron nunca el carácter de una prueba ministerial, pues esta sólo puede acreditarla como tal el propio Ministerio Público."

Fuente

Ontobelli کτγℓع dijo...

Anticipa Garza mayor violencia en México

Detienen a Ramírez Mandujano, ex titular de la SIEDO

¡Todo el Estado Mexicano está podrido!

Anónimo dijo...

U.S. war on drugs has failed, report says

Anónimo dijo...

 

Se ha perdido la batalla contra la droga”: Zedillo, Cardoso y Gaviria

Y lo están diciendo 3 ex-presidentes que algo deben saber del asunto.

Unknown dijo...

¿Cómo no va a haber narcotráfico si uno que se pasa años estudiando una y trabaja de forma estable apenas tiene para vivir decentemente?

Muchos de los narcos dejaron la escuela o apenas saben leer y ganan mucho más que un profesionista.

Ahí está la razón.

ontobelli dijo...

Elizabeth Blue Rain

Así es. empezando por los políticos que lo que buscan es el enriquecimiento personal en tiempo récord, sin importarles que el país esté haciendo agua por todas partes.

Nada de esto es nuevo. Tiene al menos 30 años sucediendo en las narices de los gobiernos. Que se han dedicado a exprimir a la industria del narcotráfico.

Anónimo dijo...

Sun-Tzu y la guerra contra el narco

Anónimo dijo...

Galván y Tello Peón, ¿ya se perdió la guerra?

Anónimo dijo...

El Presidente Obama está involucrando a EE.UU. en otra guerra que no puede ganar. Los asesinatos provocados por pandillas relacionadas con el tráfico de drogas también ocurrieron en Acapulco, sumando un total de 50 víctimas a nivel nacional durante el fin de semana.

Anónimo dijo...

Postcards from a Violent City (Juárez, Chihuahua)

Anónimo dijo...

Medina-Mora asegura que este año será más sangriento que el 2009

Afirmó que el objetivo no es terminar con el tráfico de drogas, porque eso es imposible. Lo que se busca es fragmentar a las organizaciones criminales a tal punto que dejen de plantear una amenaza a la seguridad y libertad de las personas y al control del Estado sobre porciones del territorio. Colombia, añadió, es un buen ejemplo de ello. Al final, el propósito es pasar de un problema de seguridad nacional a un problema policíaco.

Anónimo dijo...

AlterNet: How Many Mexican Drug War Deaths Can We Attribute to U.S. Pot Laws?

Anónimo dijo...

How to End Mexico’s Deadly Drug War

Anónimo dijo...

Los narcos están ganando la guerra

Anónimo dijo...

“Cárteles adoptaron la guerra de guerrillas”

Anónimo dijo...

..la idea creciente que se tiene es que la estrategia de García Luna para combatir al narco llegó al punto del fracaso y no quiere admitirlo

Anónimo dijo...

WSJ: La guerra contra las drogas está condenada al fracaso

Anónimo dijo...

¿Ya se perdió la guerra?

La historia en breve

Ciro Gómez Leyva


2010-03-23 • Al Frente


A juzgar por los resultados de la encuesta levantada ayer por el Gabinete de Comunicación Estratégica, la respuesta es sí: la guerra está perdida.

Es cierto que la encuesta (nacional, 600 entrevistas telefónicas) recoge el ánimo de una secuela de 50 días de infierno: la masacre de jóvenes en Villas de Salvárcar, la matanza en el bar de Torreón, la “crisis del Twitter” en Reynosa, el sangriento fin de semana largo en Acapulco, los muertos en el consulado de Ciudad Juárez, los bloqueos de Monterrey y el fuego cruzado en el Tec.

Aun así, las cifras son demoledoras:

• ¿Quién va ganando la guerra? El crimen organizado, 59%; el gobierno, 21%; en julio del año pasado, la proporción era: crimen organizado, 51%; gobierno, 28%.

• ¿Ha aumentado la violencia por la guerra contra el crimen organizado? Sí, 89%.

• ¿A qué se debe el aumento de la violencia? 50%, a que el crimen organizado está tomando control de la situación; 34%, a que el gobierno está combatiendo con mayor fuerza a los criminales.

• ¿Las capturas de los líderes del narco acaban con esas organizaciones? No, 79%, porque las organizaciones se dividen y forman nuevas bandas.

Quizá también producto del momento, 39% de los entrevistados afirman que no se deben respetar los derechos humanos ni la vida de los criminales. Una cifra de horror: cuatro de cada diez mexicanos quieren justicia en caliente y que los “malos” paguen con sufrimiento el mal que ocasionaron.

Ni un paso atrás en esta guerra, insiste el presidente Calderón. Pero ni se recuperan territorios ni se limpian las policías ni mejora la vida cotidiana.

Esto parece, sabe y huele a derrota. Aterradora derrota.

Anónimo dijo...

La pax narca

Ontobelli کτγℓع dijo...

El Arte de no gobernar

Rafael Segovia
26 Marzo 10

Por fin se rindió. No reconoció su derrota, ésta llegó el martes, pero se anuncia desde ahora. No tenemos fuerzas bastantes para enfrentar a los narcos por más que nos expresemos y pretexto que pongamos por delante. Se dijo con toda claridad: no fue posible resistir: fue una guerra tonta, mal calculada y peor llevada, no era cosa de amateurs. Metido en una hornacina como un santo, no de guerra, llamó a la comunidad internacional a que le echara una mano para poner fin al combate, exonerando al Ejército de tan triste conclusión. Ahora tendrá que buscar algo nuevo, alguien a quién culpar del estado en que se encuentra la nación. Chivos expiatorios no faltan: los partidos, los sindicatos, las universidades, los mexicanos que no envían dinero para sus proyectos, la desobediencia civil, los equipos de futbol que sólo saben perder. Pero no hay más que un culpable seguro: la soberanía nacional, que por confesión propia ya no podía más. El PRI es un candidato único: había creado un sistema donde el reparto de la riqueza nacional había sido acaparado por unos cuantos llamados empresarios, a los cuales no se atrevió a tocar ni con el pétalo de una rosa. Este partido sólo fue superado por los católicos inmorales de suyo, amparados por el ejemplo de su jefe nacional, César Nava, un campeón único para llevarle a una derrota sin paliativos.


Ahí estamos ahora. Y no hay competencia posible con Brasil, convertido, quiérase que no, en modelo latinoamericano, ante el desastre general que estamos viviendo, donde la confianza puesta en Chile ha desaparecido con el triunfo de una derecha que no cree en ella misma, que considera a Michelle Bachelet la persona ideal para gobernar pero vota por un carca millonario para que se haga más millonario todavía. No salimos de los problemas políticos de hace dos semanas pero ya estamos en unos nuevos. Es imposible estar en lo serio: por ahora vivimos en la intranquilidad y en esa angustia que no podemos definir sin pensar en un futuro imposible de resolver. Todo se va en preguntar por el futuro y no tener contestación.

[...]

Sólo en una ocasión la misma persona que nos honró con su presencia se había dignado a desplazarse, pese a que el viaje es bien corto. Fue para expresarse de una expresión inconveniente sobre la imperfección del Estado mexicano. Esta vez subió el tono y se recordó que el desplazamiento tenía un aviso implícito: debía traducirse por una exigencia de la conducta internacional de este país. No era, como se ha querido interpretar, una repetición de lo ya expresado. Los tres crímenes, aunque tratados con bastante delicadeza, no eran el tema de la queja, sino nuestra inacción, y además, colmo de la mala suerte, coincidió con una serie de muertes que terminaron por ensombrecer el panorama. El Presidente no se asomó siquiera al balcón. Lo dejó para mejor ocasión, para cualquier cumpleaños de su héroe histórico, donde pueda meterse en su hornacina de rigor ante un público suyo y nada más que suyo.

Las consecuencias de esta visita no están a la vista ni se conocerán en un plazo razonable: ni los narcos van a cambiar su conducta ni los consumidores gringos tampoco. Pero podemos esperar algo no del todo beneficioso: quizás algunos helicópteros más y una disminución del tráfico difícil de apreciar. Eso será todo lo que se va a decir por el momento. Fue muy descorazonador estar esperando esta visita de la que esperaríamos algo nuevo, y lo único con que encontramos fue más de lo mismo. Fue una visita relámpago en que Calderón se aferró a sus principios, a su muy particular guerra, que traducida a sus más elementales tópicos dice: hoy 26 muertos, hoy 17, hoy 21. De pronto, leemos, hoy cuatro muertos. Podemos decir: es un día de suerte. ¿Dónde está ese Estado de que presume Calderón?

Anónimo dijo...

Va ganando el cártel de Sinaloa al de Juárez: inteligencia EU

Anónimo dijo...

Informe en Washington: fracasa la guerra de Calderón

Anónimo dijo...

Mexico: The Struggle for Balance

Anónimo dijo...

Reporte: más de 22 mil muertos en la guerra contra el narco

México: más de 22.000 muertes por narcotráfico

México: nueva geografía del narcotráfico

Anónimo dijo...

México “sabe muy poquito” del narcotráfico: César Gaviria

Anónimo dijo...

Militarizar no es la solución: Bill Clinton

Anónimo dijo...

Lucha antidrogas requiere estrategias más efectivas: Clinton

Reconocen el fracaso de su estrategia.

Anónimo dijo...

Calderón: No sabíamos la dimensión de la guerra contra el crimen

La prueba de que Calderón es un PENDEJO y que nos metió a una guerra que ni siquiera dimensionó, ya no hablemos de que no tenia un plan de como y cuando ganarla.

Anónimo dijo...

¿Cómo va la guerra? / Jorge Fernández Menéndez

Anónimo dijo...

Calderón ha gastado al menos 12 mil mdd en guerra antinarco

Vaya manera de tirar el dinero a la basura.

"Para que no lleguen las drogas a tus hijos"

Y hoy hay más drogas y adictos que nunca antes.

Ese dinero aplicado en los grupos vulnerables hubiese logrado mejores resultados.

Anónimo dijo...

La guerra contra el narco está perdida: Clariond

Anónimo dijo...

El consumo de drogas se ha duplicado en los últimos 5 años

Fracaso total de la estrategia de Felipe Calderón.

Anónimo dijo...

ONU: el Estado, “atado de manos” ante narco

Anónimo dijo...

Histórica ola de violencia; 85 muertos en un día

Anónimo dijo...

Calderón y el día más violento

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Los misterios del Ejército

Anónimo dijo...

Estrategias tramposas

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Juez pide licencia por narcoataque; es el tercer juzgador amenazado

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Empujan al crimen a 40% de jóvenes

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Para 71.5% aumentó violencia

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Coinciden Zedillo y Gaviria en fracaso de guerra antidrogas

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Falla plan Todos Somos Juárez

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Las rutas del narco eran repartidas por por los gobiernos del PRI: Rizzo

Anónimo dijo...

Receta Pascual a México inteligencia para ser efectivo contra el crimen

¿Inteligencia en un gobierno en manos del pendejo Felipe Calderón?

¡Imposible!

Anónimo dijo...

Duda FBI de éxito de México en lucha antinarco

Anónimo dijo...

Matar al mensajero

Anónimo dijo...

Matar al mensajero
Denise Dresser

El Gobierno mexicano no ha sido honesto con la población del país sobre la enormidad de los retos que enfrenta

Felipe Calderón finalmente logró lo que quería. Matar al mensajero. Exiliar al embajador. Descabezar al diplomático. Obtener la renuncia de Carlos Pascual por incomodar al presidente y señalar las consecuencias negativas de la guerra que desató. Por molestar al Ejército y evidenciar que —en ocasiones— no actúa con la eficacia o la rapidez necesarias. Por señalar las fisuras internas del Estado mexicano y las agencias de seguridad confrontadas que cobija. Por informar sobre la grisura de los precandidatos del PAN a la Presidencia y cómo Calderón no siempre sabe qué hacer para fortalecer su propia posición y la de su partido. Por decir la verdad aunque duela reconocerlo. Verdad que el Presidente no quiere encarar, el Ejército no quiere oír, la Secretaría de Seguridad Pública prefiere maquillar, Acción Nacional quisiera que no fuera cierta.

Verdad recalcitrante que se asoma día tras día a pesar del número de capos arrestados, el número de armas consignadas, la cantidad de cocaína confiscada. México no está ganando la guerra contra el narcotráfico y el crimen organizado. Ni más ni menos. La renuncia obligada del embajador estadounidense no puede ocultar los 36 mil muertos, el ascenso en la adicciones, la escalada de las ejecuciones, el incremento de los secuestros, el aumento de los asesinatos, la intransigencia de la impunidad. Y se nos repite que la violencia es una consecuencia inevitable cuando —como lo señala Eduardo Guerrero en sus magníficos artículos en la revista Nexos— no tendría que haber sido así. Y se nos recuerda que se trata tan sólo de capos destazándose entre sí, cuando en realidad las ejecuciones rebasan el mundo del narcotráfico. Y se nos exhorta a denunciar a los malosos, cuando 98.5 por ciento de los crímenes en el país jamás son resueltos.

[...]

Más que matar al mensajero, Felipe Calderón debería reflexionar sobre el mensaje que envió. Contiene todo aquello que debería llevarlo a repensar la guerra y los términos en los cuales la está librando. A rectificar la estrategia que hasta el momento ha aumentado la violencia sin disminuir el narcotráfico. A replantear la relación con Estados Unidos sobre bases más honestas, consigo mismo y con sus compatriotas. A redefinir el “éxito” de su ofensiva para que la prioridad sea la reducción de las ejecuciones. Porque si no hace eso, poco importará si Calderón consiguió la cabeza de Carlos Pascual, si obtuvo aplausos cortoplacistas, si impuso su voluntad.

Mañana, cuando el embajador estadounidense haya empacado sus maletas, Ciudad Júarez seguirá siendo la ciudad más insegura del mundo. La tasa de homicidios seguirá creciendo de manera alarmante. Las instituciones de seguridad pública seguirán siendo incapaces de prevenir, detectar, investigar o sancionar la gran mayoría de los hechos violentos que atemorizan al país. El Gobierno mexicano seguirá pidiendo la ayuda del Gobierno estadounidense de manera subrepticia, y negándolo cuando salga a la luz. El mensaje es claro: si no acabamos con esta guerra —mal concebida, mal librada, mal explicada— acabará con nosotros. Y no se necesita leer los cables de Carlos Pascual para saberlo.

Anónimo dijo...

El presidente de Estados Unidos, Barak Obama, advirtió que el mandatario mexicano, Felipe Calderón, tiene cierta frustración por el fortalecimiento de los cárteles de las drogas, y por ello ha reclamado mayor participación en la lucha contra el crimen organizado.

Anónimo dijo...

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Forbes pide al gobierno de México una tregua en la guerra contra los drogas
Considera una "tontería imposible y poco realista" tratar de llevar ante la justicia a toda la delincuencia organizada y sugiere aprovechar la oportunidad "de encontrar algún tipo de solución pacífica"

Anónimo dijo...

El terror nos alcanzó. ¿Qué hacer?

Anónimo dijo...

Informe? ¡Disculpa!

Jacobo Zabludovsky

Lunes 29 de agosto de 2011

El estado que guarda el país exige una disculpa, no un informe, señor presidente Felipe Calderón.

El jueves pasado marca la debacle de toda la estrategia de lucha contra la delincuencia. En el mismo día un periodista de Sinaloa es ejecutado de un tiro en la nuca y 52 personas mueren en Monterrey por un ataque de la más desafiante crueldad a un garito corrupto. Se combate en todos los frentes. Como si se hubiera planeado, la violencia crónica asciende a violencia crítica precisamente ocho días antes del informe. Basta de triunfalismos ridículos ante la pavorosa realidad que ha puesto a México, desde hace cinco años, en el camino de una agonía terminal. Es hora de pedir disculpas y asumir responsabilidades. Basta de reuniones inútiles y atoles con el dedo. Si la Constitución obliga a presentar un informe sobre “el estado general que guarda la administración pública”, habrá que pedir disculpas no solo por declarar una guerra sin saber las características del enemigo, sino por fallar en todas las ramas de la mentada administración.

No cabe el mínimo alarde de vanagloria por nuestra situación económica. El sexenio empezó con un dólar a nueve pesos, más o menos, subió hasta 15 y se ha mantenido en 12 y pico, una devaluación de 30%. El producto interno bruto en estos 10 años promedia 1%. Otros países latinoamericanos, Chile, por ejemplo, crecerá este año un 6%. La Encuesta Nacional de Ingreso Gasto de los Hogares 2010 revela una baja del 27% de las remesas del exterior, equivalente a medio millón de familias que perdieron ese sustento. La inversión directa extranjera en el primer semestre de este año cayó 32.6% respecto al mismo periodo de 2010, según datos oficiales. El desempleo agobia a dos millones 700 mil adultos desesperados.

Después de cinco años y más de 40,000 muertos y números incalculables de secuestrados, mutilados, desaparecidos y desplazados, se puede alegar que sin la guerra contra la delincuencia el saldo trágico sería mayor, presunción indemostrable, porque lo real es la extensión del problema a todo el país y el aumento constante de bajas humanas, el incremento del tránsito de la droga hacia los Estados Unidos y el de su consumo en México. Aparte del daño al Ejército: se le ha perdido el respeto que muchos mexicanos le tenían. Otro daño colateral, el desplome de los centros turísticos. Acapulco es una ruina.

El despilfarro del dinero público alcanza niveles sin precedentes. El gasto en publicidad oficial satura todos los medios, especialmente los más influyentes y poderosos, y supera el de cualquier producto de la iniciativa privada, como refresco o dentífrico, cuya venta depende de los anuncios. Este exceso, unido a la corrupción y la ineptitud, aborta obras tan estrafalarias, inútiles y absurdas como esa megapaleta Mimí, conocida también como Estela de Luz, que con el mazacote de los senadores está en el lugar más inadecuado del mapa urbano. Sería de agradecer una explicación detallada de la peculiar manera de invertir en adefesios nuestros escasos caudales, apremiantes para la satisfacción de necesidades básicas de millones de miserables.

http://www.eluniversal.com.mx/columnas/91382.html

Anónimo dijo...

Fracasa lucha anticrimen en México, señala HRW

Anónimo dijo...

Violencia pone en jaque al PAN: Stratfor

Anónimo dijo...

Zetas, el cártel que más creció en 2011: Stratfor

Ontobelli کτγℓع dijo...

Foro internacional “Drogas, un balance a un siglo de su prohibición”

"Investigadores y especialistas en temas de seguridad y narcotráfico coincidieron que la narcoviolencia y los crímenes de alto impacto en México no cesarán hasta que el gobierno federal realice cambios profundos en su política de combate a las drogas."

Anónimo dijo...

“Yo acostumbro decir que el presidente Felipe Calderón tomó la decisión apropiada cuando enfrentó a los cárteles, porque eso no se puede dejar de crecer infinitamente. Pero se ha quedado corto en muchas cosas”, señaló.

César Augusto Gaviria Trujillo, ex presidente de Colombia

Anónimo dijo...

Ante el Estado fallido, narco-Estado sustituto

Anónimo dijo...

Imágenes de la derrota

Anónimo dijo...

Militares mexicanos registran alto riesgo a prácticas corruptas: Transparencia Internacional

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