Las más elemental lógica indica que no se debe iniciar una guerra que no se esté seguro de que se va a ganar. Para eso es
indispensable conocer las fortalezas y debilidades del enemigo; y las propias.
No es la primera vez, Felipe, que reconoces públicamente que te lanzaste a tu guerra contra las drogas sin haber dimensionado la fuerza del enemigo y sin contar con instituciones capaces. Ahora fuiste a España a declarar a un diario español,
que no sabías la dimensión de la guerra contra el crimen. Es decir, que usaste al ejército para legitimarte en el poder y en tu miopía e irresponsabilidad arrastraste a México a una guerra que ni siquiera sabias como ibas a ganar; para la que no tenías un plan de guerra, y ni siquiera contabas con información confiable sobre el enemigo. Y todavía tienes el descaro de declarar que: “
La única batalla en la que reconozco que no vamos avanzando bien es en la de la percepción”.
No Felipe. El propio gobierno de EUA, en voz de Hillary Clinton, afirma que
la lucha antidrogas requiere estrategias más efectivas. El pueblo no se equivoca cuando la mayoría piensa que la guerra se está perdiendo. Tus declaraciones erráticas y estúpidas abonan en esa dirección. No es posible que afirmes que no sabías del grado de infiltración y complicidad que había del crimen con: policías, ministerios públicos, jueces y políticos.
TODO MÉXICO LO SABÍA. Como escribí en:
Crónica de una guerra previsible.
¿En qué burbuja has vivido los pasados 20 años?
Te quejas de las armas que vienen de EUA, pero eres tú el responsable de las fronteras, de las aduanas, del ejército y de la policia federal. Esas armas están en México y son traficadas por la ineptitud de tu gobierno, incapaz de impedir su entrada y su tráfico a lo largo y ancho del país.
Nos heredarás una guerra perdida, que no supiste plantear desde el principio. Reconoces que “Va a ser una batalla muy larga y muy cruenta. Va a implicar mucho tiempo, mucho dinero y, por desgracia, va a implicar, muchas vidas humanas. Pero es una batalla que hay que librar y que unidos vamos a ganar”. Tu te vas en el 2012 y somos los mexicanos los que nos quedaremos con los costos y los efectos de tu decisión precipitada e irresponsable.
Tu gobierno ni siquiera es capaz de proteger a los candidatos de tu propio partido.
Asesinaron a candidato panista en Tamaulipas. Eso no es un asunto de percepción, como pretendes, es una perdida de control de tu gobierno sobre amplias zonas del país.
No puedes tapar el Sol con un dedo.
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